
El tráfico humano, y sobre todo de niños se ha vuelto una práctica muy común dentro del continente africano, para ello las ONG cristianas están llamando a las iglesias a ayudar a quienes están prisioneros.
Recientemente se conoció que una ONG cristiana había salvado a un niño de la trata de personas, esta vez en menores, los cuales son engañados para ser vendidos a productores de pesca y obligarlos a realizar trabajos forzados.
Ese niño salvado de nombre Godwin, de 10 años, fue secuestrado por una mujer que se hizo pasar por su tía, quien le ofreció una gran ayuda económica y así lo engañó para llevárselo y venderlo en otro país de África, en donde lo someterían a gran cantidad de trabajos forzados de pesca.
Con la excusa de que lo llevaría a visitar a sus padres y le comprarían útiles escolares, lo engañaron y lo vendieron a un pescador del lago Volta, un lago artificial muy grande que se extiende por miles y miles de kilómetros de bosque inundado.
En los días que pasó como prisionero de estos comerciantes ilegales, era levantado de madrugada para trabajar en un ardiente sol por muchas horas al desenredar redes de pesca que quedan atrapadas en lo profundo del lago; muchas veces estuvo a punto de morir debido a la profundidad en la que tenía que trabajar, otros como él no han sobrevivido.
«Contener la respiración sin respirar durante cinco o tres minutos no es fácil. No es fácil», dijo Godwin.
Por tres años fue esclavo hasta que fue rescatado por la policía de Ghana junto con la Misión de Justicia Internacional (IJM), una ONG cristiana que trabajar para erradicar la trata de mujeres y niños en el mundo; luego de ser liberado, él volvió para ayudar a identificar a otros que están en peores condiciones.
Se estima por medio de la IJM, que alrededor del mundo 10 millones de niños están prisioneros, realizando trabajos forzados y sin ningún tipo de estudios.
«La trata de personas toma muchas formas diferentes: desde niños obligados a trabajar en industrias como la agricultura y la pesca, como Godwin, hasta niños abusados sexualmente en línea para obtener ganancias financieras de sus traficantes», dijo David Westlake, director de IJM para Christian Today.
«Godwin eligió usar su libertad para llevar la libertad a otros y la Misión de Justicia Internacional está instando a los cristianos a unirse a él y a los socios globales de la iglesia para hacer lo mismo. Nos pidió que compartiéramos su historia con la esperanza de que otros niños fueran libres», agregó.
Por ello, Westlake pide a las iglesias tomar su lugar en esta lucha por aquellos que son vulnerables en la actualidad, y que puedan accionar por medio de la justicia de Dios.
«Como cristianos, estamos llamados a proteger a los vulnerables y a seguir el corazón de Dios por la justicia. Y eso sigue siendo cierto incluso durante la pandemia», afirmó.
Desde ya, hay distintas congregaciones que están siendo entrenadas en esta área para ayudar a todos los niños que están atrapados en el lago Volta, y así proporcionarles refugio y apoyo educativo; Godwin hoy en día está con su familia y está estudiando para poder cumplir su sueño de ser médico.
Fuente: Bibliatodo